martes, 11 de enero de 2022

¿No escuchas eso?

Música,

Sonidos,

Alegría,

Ruidos,

Alborotos,

Felicidad.

Es sencillo, afinca el oído.

Ven,

¿No escuchas eso?


Yirian García de la Torre. La Habana, 13 de diciembre de 2021.

 

Golpes

Prefiero los del balón en el dribleo.


Yirian García de la Torre. La Habana, 13 de diciembre de 2021.

Cine y libros para una dama

He de culparlos

O a ¿don Quijote?,

O ¿a Cervantes?

No sé.

Yo también tengo ideales de caballería,

Un don Quijote para amar,

Molinos de vientos para combatir,

Ideas, amores, sueños.

Ficción o realidad,

Animados,

Personajes, historias.

Me encanta ese mirar más lejos,

Soñar,

¿qué importa?

Los tengo y sigo alimentando ese ánimo,

Ante los derrumbes,

Los problemas,

Los abusos,

Los envidiosos,

Los negativos.

Sé que soy más,

Se que voy más lejos,

Se que los amo,

Los amo a todos,

Y parece que eso me basta.

Vuelvo a los libros,

Levanto la cabeza,

Veo las películas,

Sonrío ante la pantalla,

Del cine, la tv, la compu o el móvil.

Soy feliz.

Hago, caigo, me levanto, vuelvo a nacer.

Veo monstruos, sonrío ante el daño que me invocan,

Saco mi espada y batallo,

Veo estallar los malos ojos,

Vibro con el pétalo de una hoja,

Las alas de la mariposa

Y el zunzún que me baila cada vez más con su aleteo,

Creo en los milagros,

Crezco y me pongo pequeñita en las galletas de Alicia,

O sigo al conejo sin más.

A veces me da recelos de ver la venganza de mi felicidad.

¿Qué hacer?

Sigo feliz, veo que quien me odia o envidia no es feliz así.

Hasta le deseo bien.

¿Qué hago?

Ver de nuevo cine y leer libros.

Soy así,

Busco quien me escriba o me encierre en la pantalla de su cuadrícula.

Soy rara, ¿eh?

No, soy humana.


Yirian García de la Torre. La Habana, 13 de diciembre de 2021.

Tú (Por la novela Tú de Lester Hamlet o el fin de año 2021 contigo)

No entiendes de poesía, lo sé,

Pero el amor te llena y eso me basta.

La incógnita de conocernos bien será siempre una premisa no cumplida.

Pasan los años y somos héroes de un tiempo que nunca nos pertenece,

Un espacio que nunca nos han regalado,

Un tiempo que nos hemos dado a capa y espada,

Como caballero,

Para mí siempre eres hermoso y joven,

Siempre llevas la adarga al brazo y la espada medieval,

Siempre me siento en cada una de tus caballerosidades a otras,

Más nuevas, más lindas o más encariñadas.

En todas las mujeres que te conozcan estoy yo,

Como estás tú en todos los caballeros que pretenden llegar a tu altura.

¡Qué bueno conocerte!,

¡Qué bueno saberte llegar a mi castillo cuando agito el pañuelo para que me salves!

No sé de qué libro hemos salido,

Ni si antes escribieron nuestra historia.

Sé de la certeza tuya y la mía de estar juntos,

Amarnos y vivir esta vida cada día multiplicada en un hijo.

Romeo y Julieta, Tristán e Isolda, fueron tantas las que leí,

Y heme aquí vivirte en esas historias de amor,

Me hacen grande cada día el amarte.

Agradezco esa complicidad íntima y eterna de amarnos cada vez,

Esos latidos al unísono de un canto común,

Esa virtud de amar y ser amada.

Como eres mi caballero sé que no somos de este tiempo,

Ni siquiera comprendidos.

Somos esa historia incompleta en el tiempo permanente.

Mi caballero.


Yirian García de la Torre. La Habana, 13 de diciembre de 2021.

Abrazos (+ El libro de los abrazos de Eduardo Galeano)

Nunca creí desearte tanto.

Me gustaste en el libro de Eduardo Galeano*,

En el abrazo de la palmadita de mi madre,

En el calor de los brazos de mi esposo,

En la fe de los abrazos de mi hijo,

En el agradecimiento de vernos de mi familia,

En la distancia y el tiempo interminable de mis primos hermanos,

En la sonrisa de los amigos,

En el calor carente de algunos agradecidos de mi abrazo.

Te extrañé, y hablo en pasado, para que no te hacer eterna tu falta.

Extraño un abrazo.

Aprendí del abrazo de oso en Claudia,

De los abrazos de Psicoballet y Biodanza,

Hasta en los abrazos extraños que suenan a tintineos del corazón.

Nunca te di más importancia de ese tiempo de abrazo.

Los disfruto, vivo, gozo.

Ahora se hacen diferenciados,

Debemos esperar a que se laven,

O lavarnos antes.

Hoy son con desconfianza del que vendrá.

Este tiempo Covid 19 te ha hecho sospechoso y distinto.

Hay, incluso abrazos que no se declaran,

Solo los declara la Covid 19.

12 abrazos al día llegaron a ser el tope de la felicidad,

Hoy quiero muchos,

Necesito muchos que me mimen,

Que lleguen,

Que sean grupales,

Eternos.

Por si acaso,

Llegan a ser hasta preventivos,

Por si no volvemos a abrazar al abrazado o a la abrazada.

Yo no sé, quiero uno ahora mismo.

Ya, existimos necesarios, fuertes, íntimos, perennes.


Yirian García de la Torre. La Habana, 13 de diciembre de 2021.

* El libro de los abrazos. Eduardo Galeano.

Nasobuco

Llegaste para todos,

De diverso tamaño,

Imprescindible.

Tapas todas las bocas,

A algunas caras le eres barba o arete,

Hasta cintillo en el cabello.

Estás.

Veo tu dedicación callada,

Decidido a acallar a todos,

A distanciarles,

Lo que no logra la medida métrica,

Ni el spot o la alerta.

Tú eres una mano silenciosa,

Perteneces a todos y a nadie,

No te queremos,

Ya,

Eso no te preocupa.

Tú callas a todos, los distancias, los proteges,

A veces,

Hasta los infectas.

Tu fidelidad se lava, hierve o airea.

Tu callado, fiel, presente.

¿Qué ocultas?, ¿eh?

Cuando todo acabe, ¿y acaba?

Habrán crecido bigotes,

Soltados dientes,

Nacido arrugas,

Pasado sonrisas,

Identificados ojos,

Roto sonrisas.

Tú vuelves todo distinto.

Ya nada regresará a su lugar,

Y siento que te burlas del tiempo,

Como si te perteneciese.

Sé que estaremos juntos mucho tiempo,

Nada me parece terminar,

Has impuesto las diferencias y acentuado la mirada,

Has ocultado narices respetables y vuelto acentuadas o aplastadas otras.

Bajo tu mascarada ya no ocurren robos de bancos,

Sino desesperanzas,

Silencios,

Sonrisas, unas alegres otras más tristes.

Y siempre hubo quien no le dio tiempo a usarte mucho,

Eso me duele, hasta escribirlo.

Tú impasible,

Ser o no ser,

Estar o no estar,

Esa es tu cuestión,

Y Shakespeare no imaginó una peste de siglo XXI,

Ni amores bajo tu piel.

¿Cómo serán los besos cuando los sientes?

¿Cuántas telas han sonado a amor?

¿cuántos te bajan sin pudor?

Hasta emoticones te llevan puesto.

He llegado a temerte, porque has logrado callarme.

Ahora te llevo más ligera,

Aunque en mí represente un ahogo distinto al asma que me visita,

Contigo las montañas son como mas empinadas,

O largas,

El ahogo distinto.

Ayer vi a uno alternarte con el aparato del asma y ni protestaste,

Te dejaste llevar.

Temo acostumbrarme, aunque no tengo nada de musulmana.

¿será que tanto hemos jodido a esas civilizaciones que Dios decidió hacerlas globales?

Llegaste un marzo a Cuba y ya parece que te quedas.

No sé,

Di tú,

Ya sé que sabes más que nadie y que no contestas,

Te limitas a dejarte llevar,

Ya sabremos en este vivir juntos.

Ah, se me olvida, es casi falta de costumbre,

Gracias.

Yirian García de la Torre. La Habana, 13 de diciembre de 2021.

Necedad de amar

Estoy amando tanto.

Sin límites,

Sin elección,

Sin fronteras.

Siento el temor ajeno de no amar,

Siento la carencia en la miseria,

Siento el dolor del no amado.

Sin embargo, amo

Creo en el amor.

¿Será que me he llenado de amor,

será que el silencio de un nasobuco,

la insensibilidad de la época,

la carencia de amor de otros,

me abarrotan los sentidos?

No lo sé,

Es algo natural,

Espontáneo,

Grandioso que me llena.

No estoy desbordada, no,

Soy amada.

Parece suficiente.

Vacunas, antídotos, odios, miserias, carencias…

Se superponen en positivo y negativo,

Es el imantado efecto de saberte real.

El amor es eso,

Existe y ya.

¿Por qué he de tener una razón?

Amo y ya.

Yirian García de la Torre. La Habana, 13 de diciembre de 2021.

Poema

2021 se va del grupo, 

2022 se suma al grupo de WhtasApp. 

Bienvenido

Tiempo Covid 19


Cuando se vaya la Covid, cuando no haya 

nasobucos, ya pensaste ¿quién seremos?

Con bigotes o barbas, sin dientes o más arrugas...

Algunos tedrán tentáculos, otros la boca ladeada...

La risa sólo será visual porque todos olvidaron sonreír,

dos curvas ladean la boca, surcan la gravedad, de llantos, asombros, pérdidas.

Decir adiós no será triste, sino un vacío.

Cuando se vaya la Covid la esperanza nacerá de los sobrevivientes, y muchos siglos después contarán de la epidemia

Un año después, la Covid 19 no se ha ido,

Ya nadie vive la idea de mañana,

Las pandemias pasadas no nos dicen nada,

El universo reconoce la autodestrucción y nos pone en cuarentena,

El humano sigue arraigado a sus costumbre,

A su malsano paso de incertidumbre y autoguerra...

Pero el human ose ama a sí mismo

Entiende que el contacto humano engrandece el valor de cada uno, 

Sigue la mirada,  

abraza con ella, 

tanto y tan bien, 

que no se necesita más.

Acaricia con esa ternura de sentirse valioso, 

Autocuidado,

De cuidar.

Siente ese celo al querer a quien quiere

Y también a quien no le quiere, 

Respeta su modo de querer...

Y vuela hasta otra rama, 

Con esa música personal, 

Con su seña de saber quien es, 

Que está,

que ama y acepta ser amada

Bendice, se alegra, ríe a carcajadas

se mima y agradece... 

Finalizado 2022!